EL PODER

Debió ser de las primeras sensaciones de las que fue preso el hombre en el inicio de su eterna búsqueda. Imagino que se manifestó con todo su "esplendor" en el momento en que controló el fuego. Su condena debió ser en el momento en que "tomó posesión" la tierra (el territorio) justo cuando dejaron de ser nómadas y siguieron tras la búsqueda del poder.
Después siguieron más y más conquistas, sin saciarse, sin encontrar un fin. El hombre tomó al hombre y descubrió nuevas formas de perseguir al poder. Después siguieron las grandes conquistas, que no se conformaron con tener sus propios territorios y sus propios hombres. De Conquistadores surgieron los Reyes, en una época; la Iglesia, en en otra. Hace no mucho tiempo, la Industria fue la nueva forma de perseguir al poder y aprendió el hombre a seguir esclavizando al hombre sin la necesidad de cadenas. Hoy en día, todas ellas juntas, bajo la bandera de "Democracia" inventan nuevos disfraces para seguir persiguiendo al poder. Las estrategias cada vez más astutas pero siguen tras la misma, escurridiza rata; mañana la
tecnología, quizá se sume a las formas de conseguir un poco de poder, como soberana de todas las formas hasta hoy conocidas.
Aristóteles dicen que muchas veces creemos nosotros controlamos las cosas, sin darnos cuenta que las cosas que tenemos más bien nos tienen a nosotros. Este pequeño problema es, muchas veces, la causa de nuestra infelicidad.
Desde entonces se ha buscado la manera de conseguir ese poder, controlando, al menos, al símbolo que lo representa. En estos últimos siglos ha sido uno de los símbolos de poder el dinero y la manipulación de la energía. No podemos esperar que este juego cambie con el tiempo, de hecho, el petróleo deberá desplazar su trono, las energía alternativas.
Nos hemos vuelto tan dependientes de la búsqueda del poder que no hay forma de volver atrás de manera cuasiestática, es necesario una ruptura agresiva, que logre que nos desprendamos de los paradigmas de control que hoy tenemos.
Lo más soprendente de todo esto es que hay personas que siempre podemos encontrar a personas que han tenido un gran poder y no han tenido la necesidad de usarlo. Esto es una virtud en estos hombres porque a pesar de poder tener o conseguir algo que necesiten o deseen usando todo ese poder, no suelen hacerlo. Tienen las cosas no por adulación sino por necesidad, no hablan de sus logros para ser admirados sino impulsan a otros para tener confianza y no basar sus esfuerzos en la necesidad de "poder". Porque hacen ver que lo verdaderamente importante no es tener ese poder sino saber que no lo necesitas, porque lo importante ya lo tienes.